¿Coworking o home office? Elegí lo que más te sirve (no lo que está de moda)

Cada vez que abrís la compu, hay una pregunta que aparece sola:

¿Hoy trabajo desde casa o salgo?

No es menor. El entorno en el que trabajas define cómo te sentís, cuánto rendís y hasta cómo terminás el día. Y no hay una sola respuesta correcta: hay que entender qué necesitás vos.

Home office: ¿cuándo sirve?

• Si tenés tareas de foco profundo (como escribir, programar, diseñar)
• Si necesitás estar solo para pensar
• Si tenés una rutina armada y te cuesta cortar cuando salís
• Ideal cuando el clima no da, o estás con menos energía
• Lo mejor: silencio, control total del entorno
• Lo difícil: aislamiento, menos movimiento, más distracciones si no hay estructura

Coworking: ¿cuándo te potencia?

• Cuando necesitás un cambio de aire mental (salir del loop de siempre)
• Si querés conectar con otras personas
• Si tu casa te distrae o te “achata”
• Cuando tenés una reunión importante o necesitás inspiración
• Lo mejor: otro ritmo, más energía, contacto social
• Lo difícil: puede cansar si lo hacés todos los días sin necesidad

Entonces, ¿cómo decidir?

Te dejamos esta regla simple:

¿Estás con energía y foco? Home office.

¿Te sentís bloqueado, apagado o disperso? Probá coworking.

Y si nunca fuiste a uno, en Desky te damos espacios flexibles para que lo pruebes un día sin compromiso. Porque no es todo o nada: es tener opciones. Y elegir según lo que necesitás hoy.